Una de las cuestiones que plantean los pacientes en su primera visita a un centro de implantes es si se trata de una solución definitiva a la ausencia de piezas dentales.
Todos los estudios realizados confirman sin ninguna duda que los tratamientos de implantes son los que ofrecen mejores resultados de duración, confort y estética para restituir los dientes perdidos o los que están en una situación comprometida y requieren su extracción.
Actualmente hay pacientes que llevan prótesis sobre implantes desde hace más 30 años. Como en cualquier tratamiento odontólogico, su éxito depende de una serie de factores:
- Condiciones anatómicas y fisiológicas del paciente. La cantidad y la calidad del hueso van a condicionar el futuro del tratamiento. Un buen diagnóstico será clave para abordar la colocación del implante de forma precisa.
- Causa de la pérdida del diente o dientes naturales. Esto va a marcar también el futuro del implante dental. En el caso de la enfermedad periodontal, siempre que esté controlada, en la inmensa mayoría de casos se puede realizar un tratamiento de implantes con éxito.
- Hábitos. El porvenir del tratamiento depende también del paciente y de sus hábitos. En este sentido, el tabaco es uno de los factores que puede poner en riesgo un tratamiento de implantes, tanto en el proceso de osteointegración como en el mantenimiento a largo plazo.
- Higiene personal. Algunas personas piensan erróneamente que unos dientes fijos atornillados no requieren la misma limpieza que unos dientes naturales. De hecho, la recomendación en ambos casos es la misma: limpieza tres veces al día y siempre después de ingerir alimentos.
- Mantenimiento en clínica. A la limpieza personal, hay que añadir la limpieza profesional. Por eso, normalmente una vez al año, se debe citar al paciente para realizar el mantenimiento de su tratamiento. La revisión anual consta de:
- Ortopantomografía. Este diagnóstico por imagen es el que dirá al implantólogo si el implante goza de buena salud.
- Desmontaje de la prótesis, en caso de tramos o arcadas completas, y limpieza.
- Inspección de la zona donde están colocados los implantes para evaluar el estado de la encía, algo fundamental para la salud de los implantes.
Experiencia y profesionalidad del implantólogo. El odontólogo generalista no está capacitado para realizar determinados tratamientos. Este es el caso de los implantes dentales, que requieren una especialización.Esa cualificación en implantología, junto a la experiencia acumulada por el profesional y la dedicación exclusiva a los tratamientos de implantes, marcarán el resultado final y la satisfacción del paciente.
